Happy V Day! Cuando escuchamos esto
seamos reales, nada de Happy Valentine’s Day. Lo que realmente significa es
Happy Vagina Day! Bueno les estoy siendo honesta, ¿o prefieren un blog donde
solamente hablamos lo que los auspiciadores nos propongan? Not here! Así es y
será siempre la esencia de nuestra página. Desde hace mucho tiempo he querido
hablarles de este tema y no encontraba la ocasión, porque honestamente no quiero
sexualizar mis plataformas sociales, aunque por ahí dicen que, “sex
sells”. La vagina, si esa cosa fea que tenemos nosotras las mujeres allá
abajo; (bendito, ¡no le digas así!); que en muchas ocasiones no queremos mirar,
le hacemos caso omiso y pretendemos que ni existe; sí, ella está tratando de
decirte algo. A la hora de bañarnos a penas la miramos, la tocamos rapidito,
porque según las leyes y estatutos establecidos, nadie toca eso. ¡Pues no!,
nadie lo toca, pero tampoco la deberías ignorar.
Nuestra área genital es parte de
nosotras y de quienes somos. Hay algunas mujeres que hasta nombre le tienen,
no, todavía yo no he hecho eso y no me llama la atención, siento que le otorgo
poder y ¡no!, aquí mando yo. Es bien saludable conocer nuestro cuerpo,
escucharlo y sentirlo, esto nos puede ayudar en un futuro a prevenir enfermedades. Tener conocimiento sobre nuestro cuerpo es lo mejor que
podemos hacer por nosotras mismas. Pero, ¿por qué debo tener conocimiento sobre
mi vagina? ¿Qué es lo que ella está tratando de decirme?
Les voy a contar una anécdota de una
niña en tiempos, muy, muy lejanos. Mejor dicho, una adolescente, como en
sus 15 años de edad. Cuenta una leyenda urbana, que esta chica durante la clase
de Salud; (para mis hermosas lectoras en Latinoamérica esta materia es la de
Sexología); mientras la profesora explicaba la parte femenina del cuerpo menciona la palabra clítoris, y esa adolescente, preguntó ¿qué era eso? La
pobre inocente, no sabía lo que llevaba entre sus piernas, ¡increíble! La
profesora, una educadora muy profesional, la mira directamente a los ojos, y
procede a explicarle. El problema era que ese acto de ignorancia le iba a costar; toda la comunidad escolar ya luego de terminada la
clase se habían enterado que había una chica que a sus 15 años de edad
no sabía lo que era su clítoris. Este chisme estuvo tan caliente que,
hasta uno de sus amigos cercanos, vino con la gran historia a la misma chica y mientras
todos se morían de la risa, ella confesó que la ignorante era ella. Sí, mis apreciados lectores, esa chica era yo. Así como me sucedió a mí, hay
muchas chicas que en la actualidad se encuentran bajo duda y sin saber cómo funciona su cuerpo.
Lamentablemente personas con malas
intenciones pueden aprovecharse de esta situación. A esto es lo que yo quiero
atacar fuertemente. Tener
conocimiento sobre los temas a nuestro
alrededor es desatar juicio sano y más cuando es basado en entendimiento. Esto
nos hace aptos para resolver, evitar peligros y nos permite aconsejar a otros
sobre los temas que dominamos. La clave es educarnos y buscar información para evitar ser víctimas y ridiculizadas.
Nuestros padres para
sobre protegernos nos llevan; (si los dejan); todos los días a la iglesia, para confesarnos. Nos
inculcan que, si nos portamos mal sobre nosotros va a caer la furia del celeste
y vamos a morir quemados por el fuego del maligno; por lo menos así me criaron
a mí. Hablar de sexo, ¡ni se diga! Que alguien de la familia le diera la
curiosidad o atrevimiento de preguntar, ¿de dónde venían los bebés? Te iban a
dar una explicación ilógica y era mejor que aprendieras de esos temas en la calle.
Gran error, ¡gravísimo! Así fue que yo aprendí sobre lo que era la sexualidad.
Unos “amigos” en mi escuela que ya estaban activos sexualmente y otro que ya confesaba su homosexualidad desde temprana edad. ¿Qué les puedo
decir? Así eran los tiempos en los que crecí. Gracias a Dios, a mí no me dio
tanta curiosidad y seguía con mi ignorancia de niña confusa; yo ni siquiera
quería mirar esa cosa extraña entre mis piernas, porque sentía que era un
pecado capital.
Desde joven me encantaba la
biología, aprendía tanto, cada vez que mi profesora de ciencias hablaba sobre
ese mundo microscópico. ¡La ciencia me lo explicaba todo! Me encantaba tanto esa
clase de Salud. ¡Cuánto hubiese querido que desde más temprana edad me hubiesen
ofrecido dicha asignatura! Hubiese deseado el poder discutir temas sobre los
cambios de mi cuerpo y mis deseos más íntimos desde mucho antes. ¡No se hagan!,
hasta ustedes tenían un crush en la high school por el cual se morían y
hasta le escribían cartitas de amor en secreto, yo tenía tres, ¡opps!,
siempre he sido especial.
Nuestro sistema reproductivo produce
hormonas, nuestra vagina tiene tres funciones principales, periodo menstrual,
recibir el pene mientras ocurre el acto sexual para recibir los espermas
(bebés, ¡yayy!!, ¡¡después de los 30!!!! ¡¡prohibido antes!!!) Es por el canal
vaginal por donde el bebé pasará antes de salir a este hermoso mundo.
Nuestra vagina es parte de nosotras,
nuestra esencia y parte de ser mujeres. ¡Nosotras traemos vida a este mundo!
Algo que si lo analizas es inmensamente maravilloso y mágico. Sin nosotras no
hubiese humanos en este planeta.
El ignorar nuestra vagina puede
causar depresión vaginal, sí, aunque no lo creas. Existe esta enfermedad, que
se llama Vulvodynia, y los especialistas la determinan como depresión vaginal,
la cual causa un fuerte dolor. En algunos de los casos la causa de esta enfermedad es la falta de
relaciones sexuales, ¡uff! ¡qué fuerte todo esto! El conocer nuestro cuerpo
específicamente nuestra área íntima, nos permite que nuestra vagina esté feliz.
Vagina contenta, mujer contenta, sociedad en paz. (¡Jajajajaja, cuando mi mamá
lea esto, me va a regañar).
No tengas miedo de conocerte. Te
recomiendo que cuando te des una ducha tomes un espejo y estudies tu anatomía.
El conocer tu área íntima puede evitarte enfermedades, te da una imagen más
clara de tu cuerpo y lograrás entenderte mejor. También conocer tu parte
íntima te va a ayudar a tener mejor conexión con tu pareja. Es recomendable que
conozcas tu cuerpo bien, para que puedas satisfacerte en la intimidad, (conocer
tu clítoris, tu punto g para poder lograr llegar al clímax).
Una vez una amiga me preguntó, y
créanme estuvo dando rodeos al asunto por largo rato, hasta que finalmente se
decide y me dice, te voy a preguntar esto y no te burles, y yo, ok lo prometo,
¿tú has llegado alguna vez a tener un orgasmo?, porque, yo no. Le contesté, sí.
Esta joven ya casi entrando a sus treinta años de edad no conoce bien su cuerpo
y nunca había experimentado, el placer tan intergaláctico que es tener un
orgasmo. Yo tan honesta, con este gran don de saber escuchar y aconsejar, le
dije, lo primero que tienes que hacer es las paces con tu vagina, de seguro
ella está deprimida, si yo fuera tu vagina te odiaría, ¿cómo te vas a olvidar
de darle placer? No mis damas hermosas, no hay nada malo en conocer nuestro
cuerpo. Esta chica tenía una peculiaridad, de siempre andar de mal humor
y desde afuera yo como espectadora de su vida, podía observar que dentro de
todo no le faltaba nada. Tenía un buen compañero, un profesional, ambos con buenos
trabajos, buenos automóviles y estudiando buenas carreras. Entonces, ¿qué
pasaba con esta chica que siempre andaba de mal humor? Nunca había tenido la
experiencia de sentirse satisfecha completamente durante la intimidad, ahora
entiendo tanto. Pero, así como ella hay muchísimas otras mujeres, que dentro de
nuestra cultura ven como malo la satisfacción para ellas a la hora de la
intimidad.
A continuación, te voy a ofrecer
unos consejos para cuidar mejor de tu área genital. Esto es lo que tu Vagina te
quiere decir, cuidémonos bien, ¡please!
1- Come
yogurt, esto ayuda a mantener la flora bacteriana en un buen pH. El ingerir
este alimento frecuentemente te ayuda a evitar hongos, infecciones, los cuales
son causantes del mal olor.
2- Dile
no al jabón fuerte en esta área, enjuaga tu vagina con agua tibia, nunca muy
caliente, y lava más con agua que con jabón. Los jabones fuertes cambian el pH
de la vagina que neutralizan las bacterias existentes en ella. Algunos jabones
pueden causar irritación, cambian tu pH.
* El
pH (potencial de hidrógeno) de los genitales de la mujer es el sistema de
defensa que tiene la vagina para evitar la contaminación externa.
3- No
utilices duchas vaginales, estas hacen que tu vagina huela a flores, pero con
su lavado, también se llevan enredadas las bacterias saludables.
4- Mantén
súper limpia tu área cuando estés en tu periodo menstrual. Cambia tus toallas o
tampones constantemente, para que te mantengas saludable durante tu periodo.
5- Utiliza
ropa interior de algodón, este material absorbe mejor la humedad, lo que hace
que el aire fluya y no se acumulen bacterias y hongos por la humedad. Por lo
personal no puedo utilizar ciertas telas, chiquitas y sexys porque no permiten
el flujo del aire, y resulta en una catástrofe.
6- Duerme
durante la noche sin ropa interior, esto le da un tiempo a tu área personal
para que descanse y sea libre como el viento.
7- No
utilices ropa apretada todo el tiempo, esto causa mala circulación y activa
alta producción del pH, lo que conlleva al desarrollo de infecciones por
hongos.
8- Si
ves cambios en tu vulva, vagina o algún tipo de secreción diferente, ve
inmediatamente al médico.
9- Si
estas activa sexualmente en la actualidad, te recomiendo que selecciones
primeramente muy bien a tu pareja. Por lo personal les recomiendo que si aún no
van a tomar una decisión de formalizar las cosas (¡cásate!, como dice Beyonce, “if
he likes it then he should’ve put a ring on it”, ya me escucho como mi
madre).
Vayan ambos y háganse
las pruebas pertinentes de transmisión sexual (ETS), para descartar cualquier
duda y estar más tranquilos en su relación. Utiliza condones, el utilizarlos no
certifican que no vas a contraer enfermedades, el roce de piel con piel, o con
el escroto del hombre, te puede hacer que contraigas, herpes, ladillas, entre
otras enfermedades, que NO queremos que ninguna de ustedes adquiera.
10- Inmediatamente luego
del acto sexual, limpia tu área solo con agua fría o tibia, esto hace que el
efecto posterior al encuentro sexual sea uno no desagradable. Orina luego del
acto sexual. Cuando realizas el acto sexual, bacterias de la uretra o el ano
pueden viajar hasta tu vagina, para evitar su alojamiento. Por eso se
recomienda que vayas al baño seguido al acto.
11- Haz ejercicios
vaginales. Si aún no tienes conocimiento sobre estos, busca información sobre
los ejercicios vaginales Kegel. Con el pasar de los años, el dar a
luz, si estás muy activa sexualmente, esto causa que los músculos de la vagina
tiendan a debilitarse y por tal razón tenemos que ejercitarla.
12- Siempre come frutas
y vegetales. Adicional a todos los beneficios que ya todas sabemos, ahora le
añadimos otra razón más para mantenernos comiendo saludable, la pregunta es
¿por qué no lo hacemos? Ingerir alimentos saludables, aporta a que nuestras
vaginas se mantengan oliendo bien. Existe otra leyenda urbana que se cuenta,
(yo no sé nada sobre esto), que dice que su sabor es uno hasta mucho mejor.
13- Bebe mucha agua,
esta ayuda a mejor lubricación.
No olvides ir a tu ginecólogo para
tu chequeo regular. Cuidarte es amarte, y aquí nos preocupamos por ti, y tu
salud. Recuerda tu familia te necesita y te necesita saludable. No tengas
muchas parejas sexuales. No hay nada mejor que tener una relación monógama, con
alguien que te ame, te respete y te cuide. El descubrirse y jugar con respeto,
eso es fundamental para relaciones sanas, largas y duraderas.
En esta página las queremos mucho y
las queremos a todas saludables. Para estar
contentas no necesitan pareja,
aprende a descubrir tu cuerpo y despójate de los tabús. Hay tantas
maravillas en amarse uno mismo que sé que te faltan por descubrir, les hablo a
mis nenas solteras. Si eres de las privilegiadas que logró encontrar a su
media naranja, aprendan juntos a descubrirse y a satisfacerse con respeto y
amor. Para los hombres es súper fácil la satisfacción, (ya lo sabemos, ¡duh!),
pero la persona que te ama, te respeta y te valora, va a dedicarte el tiempo
que te mereces y te va a tratar como la gran reina que eres. Tú te mereces lo
mejor, no te conformes con menos. Y como dice mi madre, “mejor sola que
mal acompañada”.
Si desean más información, sobre
algunos de los temas discutidos en esta publicación simplemente deja tu
comentario. Si eres más discreta ¡contáctanos!, envíanos un mensaje a
nuestro email, zilmyvazquezblog@gmail.com
¡Nos vemos en la próxima!
Besos y Abrazos ♥
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